Infertilidad masculina, existe y se debe hablar de ello

La infertilidad es un problema de salud mundial. Los datos disponibles indican que entre 48 millones de parejas y 186 millones de personas tienen infertilidad en todo el mundo. La infertilidad va en ascenso, y la infertilidad masculina es una condición compleja, estresante para los pacientes y su entorno. 

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La infertilidad se define como la incapacidad de lograr un embarazo espontáneo en parejas sexualmente activas, sin utilizar métodos anticonceptivos en un año. 

El concepto cambia cuando las pacientes femeninas son mayores de 35 años, en este caso, la infertilidad se define como la incapacidad de lograr un embarazo en más de 6 meses. 

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Si hablamos de estadística, el 40% de las causas de infertilidad son de origen femenino, 40% de las causas de infertilidad son de origen masculino y en 20% de los casos, ambas personas tienen algún factor causal o de origen inexplicable. 

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Por lo tanto, en una pareja con infertilidad, la evaluación masculina es fundamental: 

• Se debe realizar una historia clínica completa, donde se abordan aspectos de la infancia, hábitos actuales como lo es el tabaquismo o el uso de sustancias nocivas, su ocupación, si ya tuvo paternidad comprobada con la misma o con otra pareja y el tiempo de infertilidad
• Si existe pérdida gestacional recurrente en la pareja o si ya hubo falla a tratamientos de in vitro previos, se recomienda el uso de medicamentos o suplementos como anabólicos, siempre con autorización médica
• Saber si se realizaron cirugías previas como la vasectomía
• Realizar un examen físico
• Realizar una espermatobioscopia directa, pero se debe realizar en un lugar que sea especializado en reproducción
• Toma de exámenes complementarios, como lo son: estudio de VIH, Hepatitis B y C, sífilis, estudios genéticos y hormonales. Estos permitirán obtener el diagnóstico etiológico y, por lo tanto, el tratamiento adecuado. 

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El objetivo de la evaluación masculina es identificar:

1. Condiciones potencialmente reversibles como varicocele (dilatación en las venas del escroto), infecciones y disfunciones sexuales.
2. Condiciones irreversibles en la cual las terapias de reproducción asistida (TRA) permiten la utilización de espermatozoides del paciente (criptorquidia).
3. Condiciones irreversibles en las cuales se requiera utilización de semen de donante o adopción.
4. Enfermedades graves y/o de riesgo vital, que pueden producir infertilidad y requieren atención médica  (ej. cáncer testicular) para congelar semen previo a su tratamiento.
5. Enfermedades genéticas que pueden afectar la salud de la descendencia. 

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Estos temas deben ser conocidos por toda la sociedad, y es importante que cuando una persona, ya sea de manera individual o en pareja, tiene dificultades para lograr un embarazo, se deben estudiar los antecedentes y aspectos relevantes de ambos. 

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